¿Alguien cree que los libros han quedado obsoletos? ¿O que la gente ya solo consume libros digitales? Si es así, estáis equivocados.
Según el Barómetro de Hábitos de Lectura y Compra de Libros en España 2020, el libro es considerado un bien de primera necesidad para muchas personas. De hecho, año a año aumentan las producciones de libros impresos.
Tal y como se ha recogido en dicho estudio, el 68,8% de la población española leyó algún libro en 2020. Ahora bien, uno de los datos que tiene más valor es el siguiente: el 64% lo hizo por puro entretenimiento. Tan solo el 23,1% lo hizo por trabajo o estudios. Por lo que queda más que claro que la afición por la lectura sigue latiendo y todo apunta a que así seguirá siendo.
Lo más importante sin duda es el aumento de compradores. El 50,7% de la población española realizó la compra de algún libro. Lo que supone un incremento de casi 2 puntos con respecto al 2019.
Las impresoras digitales actuales facilitan enormemente la consecución de estos datos, ya que pueden publicar bajo demanda. Las principales ventajas de la agilidad en los procesos de impresión son:
- Favorece que los nuevos libros lleguen al mercado mucho antes.
- Facilitan tiradas ultra cortas.
- Ediciones económicamente viables.
En conclusión, las nuevas tecnologías de impresión digital favorecen la producción de libros impresos ya que no hace falta producir un gran número de libros y que se terminen quedando en stock, ya que la agilidad del proceso permite hacerlo de inmediato y cuando se necesite.